La marca de whisky escocés White Horse es un nombre insustituible en la historia del whisky. En su punto álgido, la marca vendería más de dos millones de botellas al año, siendo una de las 10 marcas más vendidas del mundo. Hoy en día, además de no figurar ya entre los whiskies más apreciados, el Whisky Horse Scotch sigue teniendo su legión de aficionados. Sigue leyendo este artículo para saberlo todo sobre esta marca de whisky escocés.
Whisky escocés White Horse
Aunque la marca existe desde antes de 1890, ése fue el año en que White Horse se ganó su reputación como la bebida espirituosa de alta calidad que es. El responsable de ese auge fue el “Inquieto Peter’?
Mackie, que era a la vez el creador del espíritu y el presidente de la marca. Siendo de Speyside, el White Horse Scotch sorprende por no ser tan agresivo como cabría esperar de un whisky de esta zona, con sabores más amargos y punzantes. White Horse tiene un ligero toque de turfle y una fuerte presencia de Lagavulin, para acabar en un escocés suave y de cuerpo redondo, con un ligero color dorado y un final ahumado, largo y agradable.
Características del Whisky escocés White Horse
Aromas
En el primer impacto, se siente el alcohol, así como un fuerte aroma a malta ahumada. Al cabo de un rato, el alcohol desaparece y empiezan a aparecer otros aromas, como el de las galletas saladas. Al añadir hielo, el aroma a malta se mantiene, pero empieza a aparecer un aroma a menta. Con el agua, en cambio, los aromas ahumados se hacen más fuertes, mientras que el alcohol se suaviza.
Sabores
Además del aroma inicial a alcohol, no tiene un aspecto fuerte en cuanto al sabor. Con un sabor suave, el alcohol no es una característica destacada. El escocés White Horse tiene un sabor general a galleta, siendo suave y blando. El final de este whisky es largo y seco, con ligeros sabores a humo y cereales. El hielo y el agua no alteran el sabor del Whisky.