Beber y comer son dos maravillosos placeres de la vida, sobre todo si se combinan a la perfección. Pruebe estos maridajes de whisky y comida, ¡y diviértase! ¿”Maridaje”?
no tiene por qué significar sólo si vas a disfrutar de una copa de vino blanco o tinto con una comida. El término puede aplicarse a cualquiera de sus bebidas favoritas, especialmente al venerable whisky escocés. Por supuesto, el whisky escocés se disfruta (y a menudo debe disfrutarse) a solas, preferiblemente frente a un fuego crepitante. Pero también puede combinarse muy fácilmente con una amplia gama de sus aperitivos o platos favoritos. Aquí tienes algunas ideas de comidas estupendas para complementar tu botella favorita.
Aquí tiene los mejores maridajes de whisky y comida que debería probar.
Quesos ligeros y medianos
No todos los escoceses combinan a la perfección con el queso, pero algunos tipos ligeros combinan muy bien con una amplia gama de quesos que no son pesados. Por ejemplo, un whisky de malta con un ligero toque picante, como el Aberlour, combina a la perfección con el manchego, sabroso pero no demasiado fuerte. Los quesos más sabrosos y cremosos, como el queso de cabra (aromatizado o no), combinan bien con algo de cuerpo más medio y afrutado, como el Aberlour de 12 años o el malta Speyside. Si le gusta un whisky con turba y muy terroso, puede probar este maridaje retorcido de whisky y comida: quesos de dureza media a ligeramente más duros que suban la apuesta de la salinidad y cualquier cosa bien curada, como el gouda o el Parmigiano-Reggiano. Entre los escoceses con mucha turba que combinarían bien con éstos están el Balvenie Peat 14 años o el Big Peat Small Batch Islay.
Chocolate
Todo el mundo tiene un tipo de chocolate favorito, pero eso no significa que puedas ponerlo con tu bebida espirituosa preferida cuando consideres el mejor maridaje de whisky y comida, ya que puede que no vayan tan bien como crees. Si le gusta el chocolate con leche, especialmente el chocolate con leche con frutas o frutos secos, acompáñelo con un whisky escocés ligero con notas afrutadas. Las opciones incluyen el Macallan Edition No. 6, el Glentauchers 10-year-old single cask o el Highland Park 18-year-old. El chocolate con menta ayuda a suavizar los escoceses más mordaces e intensos, como el Organic 2010 de Bruichladdich y el whisky escocés de 10 años de Edradour. La menta del chocolate les sacará el máximo partido. Para los que sólo comen chocolates negros robustos y ricos (oye, también son más sanos para ti), van bien con los whiskies ricos. Se complementan, en lugar de eclipsarse. Prueba el Balvenie Doublewood de 12 años, el Glenfiddich Fire and Cane, o el Laphroaig Quarter Cask. 
Nueces
La regla general en este caso es: el escocés fuerte va bien con los frutos secos más dulces, el escocés más dulce con los frutos secos amargos y los frutos secos tostados con el escocés ahumado. Si sigue estas pautas para maridar un escocés con la comida, se verá recompensado con unos sabores fantásticos. Los frutos secos más dulces, como las almendras Marcona gourmet españolas, las macadamias y los cocos, se complementarán con el musculoso whiskey Bruichladdich X$ Quadrupled o el single malt Macallan Classic Cut 2020. Los frutos secos del lado amargo, como la kola o las almendras amargas, necesitan algo dulce, como el Glenlivet Caribbean Reserve, el Glenmorangie Nectar D’Or single malt o el Brenne Cuvee Speciale. Para frutos secos muy tostados -algunos cacahuetes, anacardos y nueces- elige el Smoky 12 de Benriach o el Wee Beastie de Ardbeg. 
Pescado y marisco
¿Qué tomas hoy del mar? Cada una de las capturas merece una atención especial a la hora de maridarlas con whisky escocés. Los pescados que se encuentran en los ríos, como la lubina, la trucha arco iris, la perca y algunos salmones, combinan mejor con maltas suaves y afrutadas, según scotchwhiskey.com, incluidas muchas opciones de Glenlivet y Glenfiddich. Los mariscos más salados – caballa, otros salmones, sardinas – requieren un whisky más fuerte, como Talisker o cualquiera de Laphroaig. Muchos elaboradores de whisky juran que las ostras se encuentran entre los mejores maridajes de whisky y comida, especialmente las opciones ahumadas, saladas y ácidas que complementan a las ostras minerales. Buenas opciones ahumadas para las ostras son el Ardbeg Dave Cove, de Islay (Escocia), el New Riff Backsetter o el Balcones Brimstone. Otros mariscos que combinan bien con el escocés turbio y ahumado: las vieiras y el cangrejo. Si te gusta el sushi, prueba cualquier whisky escocés sin pelar. 
Fruta
Las posibilidades son infinitas cuando se trata de maridajes con whisky escocés a base de frutas. Más Frutas ácidas, como manzanas, peras, arándanos y limón, son las que mejor combinan en general con cualquier whisky escocés, especialmente los single malts como Clynelish, que ya tienen toques de fruta. Otras buenas opciones: Robert Burns Blended, Tullamore Dew y Auchentoshan American Oak. Las frutas demasiado cítricas -naranjas, mandarinas, piña- no son fáciles de maridar con el whisky escocés. Algunos evitan combinarlos, mientras que otros apuestan por la combinación de picante y ahumado. Procede con cuidado. 
Bistec
Un filete a la parrilla, como una jugosa tira de Nueva York o un chuletón de buey, marida muy bien con un escocés matizado con un dulzor que sigue teniendo cuerpo. Aquí hay muchas opciones para maridar un filete con un escocés. Prueba la serie Flora ; Fauna de 12 años de Balmenach, el Sherry Oak de 12 años de Macallan o el de 16 años de Dailuaine.
Solomillo magro
Un solomillo magro o un filete van bien con un escocés picante que resalte la naturaleza sabrosa de los cortes. El Macallan Sherry Oak 12 años también funciona aquí, pero otras opciones son Bruichladdich The Laddie 10 y Bunnahabhain 12.
Lomo
El solomillo combina de maravilla con el Auchentoshan de 12 años y su sabor a malta y hierba, según whiskyadvocate.com, que también adora combinar un chuletón con el Yoichi de 15 años y un solomillo con el Stranahan’s Colorado. ¡Bienvenido a la ciudad del sabor!
Pastel de carne
El pastel de carne, sí, el pastel de carne, se actualiza dentro del mundo de los maridajes escoceses, especialmente con algo turbio, picante o un centeno. Sí, incluso cuando se usa salsa en el pan. Y ya que hablamos de filetes, las costillas o el lomo de cerdo son siempre una opción segura con whisky escocés. En general, sigue el consejo de Brent Young, de Brooklyn’s The Meat Hook. “La grasa equivale al sabor, por lo que un corte más magro podría no ser la mejor combinación para el Whiskey”?
dijo a Men’s Journal. Por cierto, la revista recomienda maridar el filete de falda con Michter’s US1 Straight Rye, el ribeye con Redemption Rye y la panceta de cerdo con Buffalo Trace Bourbon. 
Hummus
Los escoceses con cuerpo son la mejor apuesta para el aperitivo favorito o como parte de una sabrosa cena de filete a la parrilla y hummus. Entre los escoceses complejos -advertencia: son intensos- para el hummus figuran el Redbreast Lustau, el Yamazaki de 12 años y el Hibiki de 17 años. Hay otras salsas que combinan bien con el whisky escocés, como las tortillas fritas (prueba con una mezcla de malta) y la salsa con trozos (usa algo ligeramente afrutado).
Aceitunas
Aceitunas verdes, aceitunas recogidas, aceitunas de tarro básicas: cuando se trata de maridajes con whisky escocés, éste es fácil. La salinidad y la salmuera de las aceitunas, especialmente las rellenas, maridan exquisitamente con una gama de whiskies escoceses. También es la razón por la que alegran bebidas como el whiskey sour y el old-fashioned. La clave está en no pasarse con la turba ni con la complejidad. Cualquier single malt de cuerpo ligero irá bien.
Tarta de manzana
Sí, algo tan americano como la Tarta de Manzana es un maridaje escocés perfecto. ¿No es hermosa la vida? Al igual que con la fruta, elija algo dulce, ligeramente perfumado y ligero. Y puesto que la tarta de manzana suele incluir buenas dosis de especias como la canela, opta por los escoceses que también sean ligeramente picantes, como un Glenfiddich 15 o algo que proceda de barricas de roble. 
Qué evitar en los maridajes con whisky escocés
Cualquier cosa con mucho ajo, demasiado grasa, abrumadoramente picante, combinaciones que dupliquen el ahumado o escoceses con mucha, mucha fuerza de barrica.